Para cortar la carne de manera sencilla y evitando que perdamos sus jugos, debemos dejarla “descansar o reposar” unos 5 a 10 minutos después de sacarla del horno, de la sartén o de la parrilla.
Luego córtala en rebanadas finas siempre al contrario de la veta.
En la carne se genera presión al cocinarse y al dejarla “reposar o descansar” unos minutos antes de cortarla, se relaja evitando que perdamos sus jugos.
Si sigues éste consejo, siempre tendrás una carne muy sabrosa y jugosa en tu plato.
¡Una vez más te deseamos un buen provecho y hasta la próxima !!!