Corta la parte superior y la parte inferior de la fruta como si fueran tapas.
Coloca la fruta parada y comienza a cortar verticalmente la concha junto con la piel blanca en forma de arco con un cuchillo bien afilado.
Cuando hayas terminado, corta y saca cuidadosamente las tajadas o filetes que están dentro de las membranas de separación de la fruta y ve sacándolas una a una.
Cuando ya hayas terminado, exprime el jugo que queda en la fruta y lo recoges en un recipiente donde luego colocarás los filetes de la fruta.
Esta es una manera muy elegante de presentar las naranjas, los pomelos, las mandarinas y los limones.
¡Una vez más te deseamos un buen provecho y hasta la próxima !!!