60′ ¦ 2-4 personas ¦ dificultad
¿Cuándo uno no tiene ganas de comerse una pizza? A nosotros nos fascina y si no fuera por las calorías de más, seguro que prepararíamos pizzas todos los fines de semana.
Anoche teníamos ganas de ver la película “No Reservations” con Catherine Zeta-Jones y Aaron Eckhart, eso sí, queríamos preparar algo rapidito y sabroso.
Abrimos la nevera y resolvimos hacer pizza con tomates en tres variaciones y queso feta.
Verdaderamente mientras menos ingredientes le pongas a tu pizza, mejor te quedará.
La receta de la masa es super fácil y muy rápida de preparar.
La salsa de tomate casera siempre la tengo lista en la nevera para cualquier eventualidad de este tipo, pero si no la tienes preparada, aquí te damos una buena idea para hacerla en un santiamén.
INGREDIENTES PARA LA MASA PARA PIZZA:
- 300 gr. de harina de trigo todo uso (preferiblemente harina de fuerza)
- 1 paquete (7 gr.) de levadura seca o 25 gr. de levadura fresca
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- 125 ml. de agua temperatura ambiente
INGREDIENTES PARA LA CUBIERTA:
- 3 a 4 tomates frescos en rodajas
- 12 tomates secos rehidratados
- 1 lata pequeña de tomate triturado o troceado de 425 gr.
- 1 cucharadita de azúcar
- 1 cucharada de salsa de tomate tipo ketchup
- queso feta en trozos a tu gusto
- orégano fresco u orégano seco a tu gusto
- albahaca fresca o albahaca seca a tu gusto
- aceite de oliva a tu gusto
- pimienta negra recién molida a tu gusto
- chili en escamas o pimienta cayena a tu gusto
Tablas de equivalencias de ingredientes líquidos e ingredientes secos.
Utensilios que puedes necesitar para esta receta.
PREPARACIÓN DE LA MASA PARA PIZZA:
Tamiza la harina de trigo y colócala en un recipiente grande.
Añade el sobre de levadura seca o 25 gr. de levadura fresca y revuelve bien.
Abre un hueco en el centro de la harina, como si fuera un volcán y añade el aceite de oliva, la sal y poco a poco el agua a temperatura ambiente.
Con la ayuda de una amasadora eléctrica une los ingredientes y amasa durante 5 minutos a máxima velocidad. Verás que se forma una bola compacta.
Es hora de dejarla reposar en un recipiente untado con un poquito de aceite en el fondo, tapada con un trapo de cocina limpio en un lugar tibio (30˚C) y húmedo. Este procedimiento garantiza que la masa no se resquebraje y permanezca húmeda y brillante.
Verás como la masa dobla su volumen.
Es hora de sacarla y amasarla nuevamente con la amasadora eléctrica o si deseas, con tus manos. Introduce un dedo en la masa y si la marca queda, significa que la masa está lista.
Coloca la masa en una superficie plana para trabajarla y con la ayuda de un rodillo procede a extenderla. Una indicación de que la masa está perfecta es cuando al extenderla con el rodillo, ésta se encoje muy poco y permanece casi estable.
PREPARACIÓN DE LA CUBIERTA:
Mientras esperas a que la masa suba puedes ir preparando los ingredientes para la cubierta:
Cubre los tomates secos con agua tibia para rehidratarlos.
En un recipiente aparte, mezcla la lata de tomate triturado o troceado con el azúcar, la salsa de tomate ketchup, la sal y la pimienta a tu gusto. Reserva aparte.
Corta los tomates frescos en rodajas.
Desmorona el queso feta.
Lava la albahaca y el orégano, deshójalos y córtalos.
Precalienta el horno a una temperatura de 200°C / 400°F (arriba y abajo).
Al momento de que tengas la masa ya extendida, cubre la superficie de la pizza con la salsa de tomate, los tomates frescos en rodajas, los tomates rehidratados, el queso feta, el orégano y la albahaca, sólo si están secos o deshidratados, rocías un poco de aceite de oliva y esparces pimienta negra molida y un poco de chili en escamas a tu gusto.
Lleva la pizza al horno y hornea durante 25-30 minutos o hasta que veas que los bordes y la base de la pizza están dorados y crujientes. Si has elegido el orégano y la albahaca frescos, es hora de esparcirlos. De ésta manera podrás disfrutar de todo su aroma.
Sácala del horno y espera unos dos minutos antes de cortarla.
¡Que la disfrutes, buen provecho y hasta la próxima !!!